“El problema del algodón es que se hace mucha pelusa y se pega a la ropa, o luego hasta pica en la garganta, a pesar de que usaba cubre bocas. Pensaba que tenía alergia, pero dije –‘¡no puede ser! porque somos varios con tos’- y, mira, me salí y jamás me volvió a dar esa tos”